sábado, 16 de abril de 2011

(La idea)


Existen muchos blogs especializados en música. Muchos de ellos escritos por personas que llevan años de coleccionar ciertos géneros musicales y de profundizar en la materia. Más que fanáticos o devotos, son verdaderos sacerdotes de un culto pagano a nuestros ídolos de barro que se construyeron sobre la escala mayor de re o sobre la escala pentatónica de sol.

Yo, por el contrario, solo soy un coleccionista de discos que me gustan y que me atrevo a comentar aquí porque se me da, ahora, por hacerlo, para compartir, no mis conocimientos, que no los tengo, sino para probar si es que, con este pequeño ejercicio, puedo aprender algo más con ustedes de esto que nos une, sin importar el idioma que hablemos o de las demás cosas que marquen lo que somos.

La música ha permitido que pueda resistir en Lima, una ciudad (al menos en la parte de ella donde vivo) violenta, gris, horrible, insufrible. Una Lima que no llama sino espanta, expele, esputa. La música me ayuda, porque si puedo elegir lo que veo todos los días (esto incluye leer), ¿por qué no puedo escoger lo que escucho? Por eso, si estoy en un micro, no me obligo a oír esas horribles pistas de percusión de reguetoneros ni esas desentonadas salsas cubanas grabadas en vivo, ni tecnocumbias; nada de eso me agrada, nada de eso escucho. Nadie puede obligarme a oírlas mientras voy en una carro. Un buen disco y un buen libro siempre salvan el día.

Tengo un blog que, misma mochila de chibolo chancón, ha estado llena de muchas cosas: tonterías, pequeños ejercicios de ficción, comentarios a libros, discos, películas, tonterías, una que otra reflexión boletesca, más tonterías, destilaciones de bilis, etcétera. Bueno, creo que ya es hora de limpiarlo un poco, es decir, no meter de todo en un mismo blog. Por eso nace la idea de este blog. Por ahora no publicaré más que esta nota de saludo. El resto vendrá, si todo marcha bien, a partir de junio, mes en el que aún quiero mantener mi trabajo y que el país no termine de irse al garete.

Que viva el rock.

No hay comentarios:

Publicar un comentario